Básicamente la importancia de las consultorías es que te apoyas en una persona especialista en el tema que te ayudará a encontrar soluciones a los problemas que se presentan de manera recurrente y no se han podido solventar.
Usualmente son contratadas con personas que tiene experticia en el tema, basados en su experiencia, habilidad u oficio. Actualmente los expertos en los temas tecnológicos son jóvenes, así que no te dejes llevar por apariencias. Aunque aclaramos que esto no es en todos los casos, siempre existe la persona indicada para resolver el problema indicado.
Recuerda que al contratar una consultoría hay una relación basada en los conocimientos y las habilidades del consultor, sobre el conocimiento y la necesidad que tiene el cliente.
Estos son algunas de las razones por las deberías tener una consultoría:
Objetivo
Características
Proceso

Objetivo:
Cuando necesitas una intervención de un experto para mejorar un proceso del producto, en este caso hay dos variantes:
- Una intervención de cualquier índole estructural, política o de procedimiento de la organización que un miembro externo no está en capacidad de resolver.
- Una intervención de un experto para mantener motivado a tu equipo de trabajo.
Y aunque el punto dos parezca algo confuso, ten presente que la consultoría está basada en aumentar la efectividad de los procesos.
Características
Las características generales de una consultoría son las siguientes:
Es un servicio externo: Por lo que siempre te garantizará imparcialidad, un rasgo fundamental para que tus ideas no estén permeadas por intereses ocultos.
Es un servicio de consulta: No se trata de poner un líder de equipo para que guíe a tus trabajadores, se trata de que te enseñe las herramientas y las conductas necesarias para que puedas tomar las decisiones correctas para hacer seguir creciendo tu negocio.
Proporciona conocimientos: Un consultor se vuelve consultor cuando acumula la suficiente capacidad de conocimientos sobre varios problemas que otros no pueden llegar a resolver. Absorbe sus ideas y conocimientos sobre el tema porque seguro más adelante te podrás hallar de nuevo con ellos y en ese momento tu habrás adquirido el conocimiento suficiente para resolverlo sin contratar a nadie.
No hace milagros: las dificultades no desaparecen cuando él te da la solución. Si el problema que tiene es de fondo y no de forma, la dirección siempre debe asumir la responsabilidad de cambio. La idea es que veas la forma más viable en la que puedes resolver tu o tus problemas.
Proceso
No todos los procesos son los mismos, en ocasiones tu consultoría no requiere arrancar del mismo punto que otra, pero en esencia estas son las cinco fases que debería aplicar un consultor para entender y comenzar a buscar una solución al problema.
- Iniciación
- Diagnóstico
- Planificación de medidas (Plan de acción)
- Aplicación (Implementación)
- Terminación.